Pese a todos los pronósticos el oficialista y el libertario dirimirán el futuro del país en un mano a mano que será el 19 de noviembre. Previamente habrá un debate el próximo 12 del mes que viene.
Cuando todos los números estaban puestos en que Javier Milei ganaría cómodamente la elección general y que el segundo puesto iba a ser para Sergio Massa, relegando a una Patricia Bullrich que no remontaba, la ecuación se dio a la inversa produciéndose el triunfo del tigrense por sobre el libertario por casi 7 puntos de diferencia.
Unión por la patria cosechó –casi 8 puntos más que en las PASO-, mientras que LLA se quedó con el 29,98%, es decir que obtuvo la misma cantidad de votos que en agosto. Bullrich, de Juntos por el Cambio fue tercera con el 23,83%. Juan Schiaretti terminó cuarto y creció respecto a las PASO, para cerrar la lista Myriam Bregman del FIT – U.
Tras conocerse el triunfo, y luego de que hablaran los otros candidatos, Massa salio al escenario en soledad y con una gran bandera argentina por detrás. Todo un simbolismo en el que quiso “quitarse de encima” al kirchnerimo y mostrarse como el padre de la criatura. Además, al final del discurso, sumó a su compañero de fórmula (Agustín Rossi) con sus familias para dar una imagen cálida y no tan solitaria.
“Voy a convocar a un gobierno de unidad nacional el 10 de diciembre”, repitió. “Muchos de los que nos votaron son los que más sufren; no les voy a fallar. Desde el 10 de diciembre, no les voy a fallar”, agregó.
En ese sentido, llamó a que lo voten en noviembre «a los que eligieron a Myriam (Bregman), a Juan (Schiaretti), a los radicales que comparten valores democráticos como la educación pública o la independencia de poderes».
“Logro histórico”
En tanto, el candidato presidencial de La Libertad Avanza, Javier Milei, consideró ante sus seguidores que consiguieron un «logro histórico» por el hecho de haber llegado al balotaje y destacó «lo que hemos construido en dos años» para la evolución de su fuerza política.
«Estamos frente a un hecho histórico, producto del esfuerzo de miles de personas que en todo el país han logrado para empujar las ideas de la libertad. Es la mejor elección en la historia argentina para el liberalismo; es impresionante lo que hemos construido en dos años», señaló desde su búnker a la vez que le habló al ala dura de Juntos por el cambio para unir fuerzas y derrotar al kirchnerismo en noviembre.
Llanto de Bullrich
La candidata de Juntos por el Cambio se la vio emocionada en el escenario ante sus militantes. Lamentó que esa fuerza no haya logrado los «objetivos» en las elecciones generales y acusó al oficialismo de «populista» y de «haber empobrecido al país».
«Venimos a ratificar con toda la fuerza los valores de nuestra causa. Nuestra causa va más allá de un momento electoral y de un momento de derrota», dijo al asumir apesadumbrada esta noche su caída en el búnker de esa fuerza ubicado en Parque Norte de esta capital.
Luego, la líder del PRO acusó al oficialismo de «haber empobrecido al país» con el «populismo» y manifestó: «No soy yo quien va a venir a felicitar a que vuelva al poder a quien ha sido parte del peor gobierno de la historia argentina».
La participación: más del 77%
El 77,6% de los 35 millones de electores habilitados para votar en las presidenciales nacionales concurrió a las urnas, informó la Cámara Nacional Electoral, cifra que representó un aumento de 8% con relación a las PASO del 13 de agosto, pero al mismo tiempo transformó a esta jornada en la segunda con menor convocatoria de votantes en los últimos 40 años de democracia.
La afluencia de electores decreció algo más de 3% con relación a las presidenciales de 2019, cuando el 81,3% de las personas habilitadas asistió a las urnas en los comicios que consagraron presidente a Alberto Fernández, y fue 1,4% más alta que la de 2007, que es la presidencial de menos convocatoria (76,2%) en cuatro décadas de democracia.
Según la Justicia electoral, entonces poco más de 9 millones de personas no concurrieron a votar pese a la obligatoriedad que estipula la ley para la mayoría de los ciudadanos, salvo los exceptuados.