“Somo’ campione”: Lo que la victoria nos dejó

El mensaje de que con trabajo en equipo se pueden lograr grandes cosas debe calar hondo en una sociedad partida a la que lo único que los une es la pasión por los colores celestes y blancos.

Era necesario para empezar a hacer esta nota tomar un poco de distancia de los acontecimientos que se produjeron tras la consagración del seleccionado albiceleste en el Mundial de Qatar 2022. La manifestación humana que aconteció tanto en la tarde del domingo como el martes desde la madrugada, fue un hecho sin precedentes en donde todo el pueblo se movilizó en base a un sentimiento en común: la pasión por el fútbol.

Visto lo sucedido es imposible no pensar en que esa mancomunidad de personas de todos los niveles sociales no puedan no ponerse de acuerdo en algunos temas que tienen que atravesar la vida del país para tratar de encaminar las cosas.Los festejos por el triunfo en penales fue tal que se hizo imposible contener a la “marea humana” que fue Ezeiza, el centro porteño, pero también en muchas ciudades del país, donde la gente no paró de festejar. Y así lo reflejaron los medios de comunicación internacionales, que mostraron con increíble asombro la manera de celebrar de un país que viene de mal en peor en cuestiones como la suba del dólar, la inflación, la inseguridad, entre otros.Más allá de los más de 5 millones de argentinos que coparon la Ciudad de Buenos Aires, y de los incidentes que se produjeron con aquellos que saltaron del puente al ómnibus de la selección, es para destacar que fueron cuestiones mínimas al lado de lo que fue la manifestación que no tiene comparación en la historia del país. Es decir, ningún sistema de seguridad podía brindar contención ante tanta demanda popular, demanda que, en su mayoría, se comportó bien por las calles y solo quería ver a sus héroes.

Por otro lado, es momento de hablar del equipo. Pero no de fútbol. Hablemos de lo que representó este grupo de jugadores para la sociedad. Después de mucho tiempo una selección despertó el entusiasmo de la gente; las obtenciones de la Copa América 2021 contra Brasil y de la Finalissima contra Italia hicieron su parte en ello. Se llegaba con muchas expectativas a Qatar y estaban justificadas.

Los jugadores, por su parte, demostraron ser un equipo unido, sólido y convencido de lo que querían, con la mente puesta en un objetivo que tenía un recorrido el cual costó, pero nadie dijo que iba a ser fácil. Como en cada cosa de la vida, para llegar a un lugar, para conseguir algo hay que esforzarse (no está mal ello), trabajar para obtenerlo, sacrificarse, ser constante y paciente. Eso fue esta “scaloneta” que dejó buenos valores desde el campo de juego: entrega, responsabilidad, trabajo en equipo, levantarse ante la adversidad, compromiso con el otro, respeto, disciplina. En esta época parecen valores un poco quedados en desuso, donde no se aprecia el trabajo coordinado ni el esfuerzo, por eso esta selección con la copa obtenida también transmitió un gran mensaje a la sociedad que, por lo memos por unos días, dejó atrás las diferencias profundas que la vienen marcando durante años.

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