El histórico dirigente murió en la tarde del lunes luego de luchar contra un cáncer. Se encontraba internado en el Hospital de Trauma de Nogués desde la semana pasada, cuando su estado de salud se había agravado. Con una larga y reconocida trayectoria en la política y en el peronismo local, el ex concejal Reinaldo Ferrau, perdió la vida este lunes, luego de que un cáncer deteriorara por completo su salud. El dirigente estaba internado en el Hospital de Trauma y Emergencias de Pablo Nogués.Ferrau había nacido en Mercedes, provincia de Corrientes.
En su juventud llegó a Tortuguitas, para instalarse en el barrio Los Ángeles. Luego empezó a militar en el peronismo del viejo General Sarmiento y con el retorno de la democracia fue nombrado delegado municipal por el intendente peronista Remigio López.En los noventa, todavía en tiempos de General Sarmiento, accedió a su primer mandato como concejal y fue vicepresidente del PJ local. Fue uno de los ediles que pasó a Malvinas Argentinas en 1995, cuando se creó el distrito, cargo que tuvo hasta 2001.
Ese año dejaría la función en medio de una polémica por sus declaraciones en torno del atentado a las torres gemelas en EEUU, críticas a las políticas de ese país. El hecho tuvo trascendencia nacional, pero le valdría su alejamiento del oficialismo que gobernaba Malvinas Argentinas, por entonces comandado por Jesús Cariglino. No obstante, resurgió y una década después obtuvo la concejalía para el periodo 2011 y el 2015, pero en oposición al gobierno cariglinista. Quienes lo conocieron recuerdan el espíritu combativo que tenía Ferrau, sobre todo en tiempos donde era difícil mostrarse disidente.Durante los festejos por los 25 años de la creación de Malvinas Argentinas, recibió reconocimientos al ser uno de los concejales de aquel primer legislativo local.Pero en los últimos tiempos, su salud se había ido deteriorando ya que el cáncer le estaba pasando factura.
Con su muerte se va una de las figuras del peronismo regional de mayor trayectoria. También una forma de hacer política basada en las convicciones. Las mismas que no le hicieron dudar cuando tuvo que elegir entre la estabilidad que le daba ser parte de una estructura oficial y la incertidumbre que significaba dejar de serlo. Aun sabiendo que afrontaría tiempos difíciles, no dudo en mantener firmes sus convicciones.