La empresa de transportes administra varias líneas de colectivos en la región del ex General Sarmiento y sus alrededores, sin embargo mantiene diferencias abismales entre las unidades de la 203 y la 315, 440 y 740.
Dime a dónde viajas y te diré cómo viajarás, podría ser el lema de esta empresa de transporte público que brinda servicios en la región.
Rosario Bus tiene un fuerte monopolio en la región donde incorporó a la vieja empresa La Primera de Grand Bourg que en los últimos años era un desastre administrativamente y, si recordamos, hasta tuvo un directivo asesinado en una de sus oficinas que se hizo eco en los medios nacionales.
Esta empresa rosarina administra las línea de colectivo 203, que pasa por San Miguel y Malvinas Argentinas, según el recorrido de cada ramal.
Pero también maneja las líneas 440, 315 y 740. Tres líneas que son bien locales, mejor dicho que transitan lo que era el viejo General Sarmiento.
Pero es muy claro que entre estas cuatro líneas de colectivos hay una marcada diferencia a favor de la 203, en desmedro de las otras tres. En el primero de los casos las unidades son prácticamente nuevas, están en muy buen estado, incluso tienen aire acondicionado. Es más, y no es un detalle mejor, cuentan con choferes más preparados. Los asientos están en condiciones y tienen colectivos adaptados para la suba de personas con discapacidad.
En cambio las líneas de lo que era La Primera de Grand Bourg siempre dejan mucho que desear. Son todo lo contrario a lo relatado anteriormente. Unidades con asientos en pésimas condiciones, pocas de ellas con posibilidad de que suban personas en sillas de ruedas, sin aire acondicionado e incluso sin cortinas en las ventanas; tienen dificultades enormes para cumplir con los horarios de los recorridos, dejando, muchas veces, al pasajero esperando por varios minutos en las paradas: tienen colectiveros poco preparados para saber recibir a los pasajeros y hasta incluso algunos de ellos fuman en la unidad –como lo hemos denunciado varias veces en este medio.
No se sabe porqué de esta gran diferencia entre líneas de colectivos. Pero deja en evidencia que hay una especie de discriminación de pasajeros. Están los de «primera» y los de «segunda», todo depende de para qué lado se quiere viajar.
Es más, en la zona (San Miguel, José C. Paz y Malvinas Argentinas) las 440, 315 y la 740 son las líneas en que peores condiciones están. Si las comparamos con, por ejemplo la 341, la 371, la 365, por decir, también están varios escalones por debajo de ellas. Al final, parece ser que el cambio de dueños de La Primera de Gran Bourg fue solo un pasamanos, donde las autoridades de la empresa Rosario Bus no tienen intenciones por el momento de mejorar el servicio. Ah y parece que también alguna autoridad competente, como la Comisión Nacional Reguladora del Transporte CNRT) no viene a chequear las condiciones de esas unidades. ¿A qué se debe ello? ¿Realmente cumplen con las condiciones mínimas exigibles y se nivela la calidad para abajo teniendo que acostumbrarnos a un mal servicio? ¿O hay algún arreglo espurio?